Los Niños es de esas películas que nadie debería perderse. No sólo te muestra un mundo para la mayoría desconocido, si no que además es una lección de vida y, de paso, una lección de cómo hacer cine del bueno. De ese que tanta falta nos hace.
Los Niños nos cuenta la historia de Ana María, Andrés, Rita y Ricardo. Amigos, pololos, rivales, cómplices y por sobre todas las cosas compañeros de colegio de toda una vida. Ellos tienen Síndrome de Down y asisten al colegio, desde hace unos 40 años. Ahí, ellos han crecido y pasado por todas las etapas que pasamos todos, excepto convertirse en adultos. Un poco porque están sobre protegidos, pero también porque el Síndrome de Down les hace eso, los mantiene como niños eternos.
Hace algunos años trabajaba en una Otec y tuvimos el privilegio de trabajar con un grupo de alumnos de Coocende, el colegio donde está filmada Los Niños. Hicimos dos cursos ahí, uno de cocina y otro de artesanía y, aunque yo no hice clases y sólo iba a supervisar, esos fueron los cursos que más visité. Era lindo ir a verlos y pasar un rato con ellos y cuando las clases terminaron recuerdo que su ceremonia de entrega de diplomas fue la más emocionante de todas las ceremonias en las que estuve en esos nueve años. Y es que cuando los conoces un poquito más, ellos llegan a tu corazón. Algo en ti cambia, de alguna manera hacen que te plantees tu vida, tus frustraciones, tus rabias y tus penas. Conocerlos es una experiencia que no se olvida jamás.
Maite Alberdi en su conmovedor filme logra traspasar todo eso y más. En sólo una hora y veinte minutos nos muestra las vida de adultos de estos niños, sus deseos y frustraciones, sus penas y alegrías. Sus ganas de vivir como adultos responsables e independientes, sus ganas de amar y ser amados, sus ganas de tener una vida sexual con sus parejas. Una vida “normal” que la sociedad, las leyes, la familia y su propia condición les niegan.
Maite Alberdi nos muestra a Ana María, Andrés, Rita y Ricardo tal como son. Con una maestría insuperable y sin ningún tipo de discurso, Alberdi retrata el ímpetu avasallador de estos niños adultos que saben que ellos pueden más y que quieren más, niños adultos que quieren desafiar a su destino y que de alguna manera entienden sus limitaciones, pero quieren superarlas y dejar atrás todos esos años de sueños no cumplidos.
Los Niños es un conmovedor y muy realista retrato de la vida de estos adultos niños. No te dejará indiferente, ni la habrás olvidado a los 20 minutos de salir del cine, como pasa con muchas de las películas que vemos. Al contrario, más de alguna conversación querrás tener al respecto, porque ellos son parte de tu mundo, de nuestro mundo, están ahí, existen, son.
Por Marisa Zúñiga