Desde que existe San Netflix, hemos podido volver a ver y disfrutar algunas de esas joyitas que atesorábamos entre los buenos recuerdos de la vida. Entre ellas, algunas películas inolvidables y que funcionaron perfectamente como improntas de felicidad familiar.
Soy lo suficientemente mayor, como para haber llevado a mis hijos a ver “La princesa Prometida” al cine, un cine que ya no existe: el Pedro de Valdivia, que quedaba en la plaza del mismo nombre. Que ya no existe, luego pusieron un edificio caracol, que tampoco existe hoy (Por suerte las películas si existen y perduran y además …las de Reiner no envejecen). Fuimos los 4 , mi marido, yo y mis dos hijos que hoy son adultos, mayores de 40 y 30…. Y ahora es el momento en que yo haré que mi nieta la vea.
Reiner tiene hoy 69 años. Nació en una familia de padre director y madre actriz, creció, vivió y estudió entre películas, por lo que obviamente ha dedicado su vida a actuar, escribir y dirigir películas.
La primera película de Reiner que vi en el cine fue “Cuenta Conmigo” (1986). Una historia simple que habla de amistad y crecimiento. Es fácil reconocernos en ese grupo de niños pre adolescentes que empiezan a ejercer la libertad de ser ellos mismos, todos sabemos que crecer siempre duele un poco. El paso de niño a adolescente es un espacio de permanente desafío, por lo que lo mejor es hacer ese tránsito en buena compañía. Aquellos amigos inolvidables, que crecieron con nosotros y nos ayudaron a aprender cómo, lentamente, se deja la inocencia y se empieza a vivir en serio.
Basada en una novela de Stephen King (The Body), habla de pertenencia, de búsqueda de identidad, pero fundamentalmente de amistad. Esa de verdad, absoluta y sin restricciones. Nuestros mejores amigos siempre son los que vivieron experiencias importantes con nosotros y en ese crecimiento es donde más aprendemos. Algo que todos sabemos: crecer duele, y no sólo porque los huesos se estiran, sino porque crecer significa dejar muchos sueños de lado, enfrentarse a realidades que no siempre nos gustan y lo más importante, diseñar nuestro propio y personal camino.
Luego vino “La Princesa Prometida” (1987). ¡Hermosa historia! Con personajes que recordamos hasta hoy. Un cuento de hadas, con magia, gigantes, príncipes valientes y enamorados. Personajes misteriosos y muchas aventuras de espadachines. Lo mejor en esta película es su ritmo trepidante e “increscendo”, como una opereta cómica.
La gracia de “La Princesa Prometida”, es que hace reír y encantarse a niños de todas las edades, incluidos padres y abuelos. Hay amor, magia, héroes y villanos, castillos y princesas, personajes inolvidables… Y mucho humor. La princesa aquella, era una muy joven Robin Wright, quien hoy se pone en la piel de una dura y calculadora Claire Underwood Primera Dama de U.S.A. en la exitosa serie House of Cards. Esta película introdujo un par de conceptos, que perduran hasta hoy. Como estar “parcialmente muerto”, o “ser tan vengativo como Iñigo Montoya”. No existe niño o adulto que no la haya disfrutado y que no la recuerde. Siempre es bueno volver a verla y compartir la experiencia de un cuento clásico y hermoso con los más pequeños, que seguro querrán verla en el futuro con sus hijos y nietos.
1989 fue el momento de “Cuando Harry Conoció a Sally”, protagonizada por un carismático Billy Cristal y una muy joven Meg Ryan . Comedia romántica que plantea la dinámica de una relación de pareja a través del tiempo. Una pareja que parte casualmente siendo amigos durante muchos años. La triada funcional de lo que significa ser pareja, es claramente ser: Socios, Amigos y Amantes. Pasan muchos años siendo amigos y socios y cuando tienen sexo la relación se complica y les exige sincerar sus sentimientos. Comedia romántica simpática, con actores carismáticos, con situaciones graciosas. Y con una escena inolvidable: el orgasmo en la cafetería: “Mozo, tráigame lo que pidió ella”.
En 1990 vino “ Misery”. Otra película basada en una novela de Stephen King. Misery le dio un Oscar muy merecido a la actriz Kathy Bates, quien interpretó magistralmente a una obsesionada admiradora de un escritor (James Caan). Con una escena que todos recordamos con estremecimiento de dolor vicario. Acá Rainer cambia de tono para pasarse con comodidad a una película definitivamente adulta, que habla de obsesiones perversas y de desequilibrio mental. Un encuentro terrorífico, en un paisaje invernal agresivo y solitario. Un accidente y una mujer solitaria, que ha desarrollado una obsesión con un personaje literario. Todo en la aparente calma invernal, hasta que la locura se desata. La frase “soy su admiradora número 1” nunca había tenido un significado tan aterrador.
En 1984 Rob Rainer realizó un falso documental sobre una banda de rock que se llamó “ This is the Spinal Tap “ solo sé que es la banda favorita de Bart Simpson.
En 1992 Rainer, hace “Cuestión de honor” un drama bélico, con Tom Cruise, Jack Nicholson, Demi Moore y un gran elenco. La película se sostiene en un juicio en donde se enfrentan los códigos militares, con la humanidad . La justicia, la verticalidad del mando, con la libertad y la verdad. Con numerosas nominaciones y premios. Nuevamente Reiner se sumerge en terrenos éticos y de moralidad humana.
En 2007 dirige a Jack Nicholson y Morgan Freeman en “The Buckets List” (“Antes de partir”) Freeman , un ex profesor de filosofía que se convirtió en mecánico y en eso paso su vida, y Nicholson un multimillonario que ha pasado la vida acumulando dinero y sin preguntarse que lo hace feliz. Ambos se conocen en el hospital, aquejados de un cáncer terminal y deciden escapar para hacer realidad su lista de pendientes.
Es una película simple que se sustenta en las grandes actuaciones de Nicholson y Freeman. En la lista personal que cada uno de nosotros debería hacer, tal vez deberíamos poner cosas como las que ellos agregaron : hacerse un tatuaje, reír tanto y con tantas ganas, como para terminar llorando, confiar en un desconocido, solo mirándolo a los ojos, despertar con ganas de hacer locuras, etc., etc.
Debo decir que yo ya escribí mi lista y hasta el momento he cumplido varias.
Su última aparición como actor es el 2014 en “El Lobo de Wall Street“, en donde interpreta al padre del protagonista (Jordan Belfort – Leonardo Di Caprio ), “Mad Max Belford.” (Si, así es nombrado el personaje!)
Igual podemos decir que hay Rob Reiner para rato … y eso es muy bueno para el cine y los que amamos las películas.
Por Sarita Ahumada Gallardo