Bryan Stevenson (Michael B. Jordan), reciente graduado de Harvard decide dedicar su vida y su carrera como abogado a defender condenados a muerte. Para ésto, junto a la abogada Eva Ansley (Brie Larsen), funda “Equal Justice Iniciative” (EJI), una ONG cuyo su objetivo es ayudar a los reos en el pasillo de la muerte, la mayoría negros y pobres, condenados injustamente o que no pudieron pagar una defensa apropiada. Uno de los primeros casos que Stevenson atiende, es el de Walter McMillian (Jamie Foxx), conocido entre los suyos como “Johnny D”, que fue acusado del asesinato de la joven blanca Ronda Morrison, de 18 años. A Johnny D le jugó todo en contra, el estado donde ocurrieron los hechos, su color de piel, el color de piel de la víctima y el color de piel de quienes lo detuvieron y lo enjuiciaron. Johnny D se convirtió en el caso más emblemático de la EJI, porque puso fin, al menos para McMillian, a años de injusticia y dolor.
“Buscando Justicia” es la película anti-racismo por excelencia. Si bien a veces Cretton la lleva al límite y, por qué no decirlo, a veces exagerando el racismo y la corrupción sistemática de la policía y del poder judicial del sur de Estados Unidos, logra transmitir la impotencia y el dolor de lo que significa chocar una y mil veces con un sistema que no fue creado para todos, que no es igualitario ni justo, aún casi 130 años después de la guerra que intentó terminar con eso.
Con una actuación excelente de parte de Jordan y Foxx, la película nos conmueve, nos indigna e impacta. Y es que Cretton no da tregua, nos muestra a los esclavos inocentes y sumisos que reciben latigazos, golpes y maltratos de parte de sus infames amos blancos. Así, tal cual. Y, la verdad, es que la realidad no está tan lejos; “Buscando Justicia” está basada en el libro “Just Mercy: A Story of Justice and Redemption”, escrita por el mismo Bryan Stevenson, y fue llevada a la pantalla con una adaptación muy cercana al libro y a los hechos reales. Pero lo que hace Cretton es, si es posible, aumentar aún más el drama, juega con nuestra empatía y sensibilidad, porque nos dice que sólo hay buenos y malos, justos e injustos, víctimas y victimarios, negros y blancos. Sin términos medios.
Y cómo no, si es tal vez la única manera de mover conciencias y de darle algún sentido a estas historias tan lejanas para nosotros, pero, a la vez, tan cercanas si le damos una pequeña vuelta a nuestra realidad. Porque al final, al menos para McMillian, se hace justicia, pero nada lo hará olvidar el trauma vivido, nada le devolverá la vida que tuvo antes de que su mundo se cayera a pedazos.
Y lo que la película no dice, es que para Ronda Morrison, la niña blanca de 18 años brutalmente asesinada, la justicia aún no llega. 36 años después, su asesino aún está libre. Porque, para las mujeres, aunque sean blancas, la justicia aún es difícil de conseguir.
Marisa Zúñiga
FICHA TÉCNICA:
Dirección: Destin Daniel Cretton
Guión: Destin Daniel Cretton
Protagonistas: Michael B.Jordan, Jamie Foxx, Brie Larson